El amenazador espectro del cambio climático se cierne sobre la región de América Latina y el Caribe (ALC), afectando su rica biodiversidad y extensas costas con fenómenos meteorológicos extremos, aumentos del nivel del mar y patrones meteorológicos erráticos. Los incidentes hidrometereológicos inducidos por el clima y las catástrofes secundarias han ido aumentando en frecuencia y severidad, con nueve países de ALC entre el top 20 mundial de países en riesgo. Las catástrofes anuales incrementaron por un 200% entre 1900 y 2022, lo que da como resultado un total de 2.078 catástrofes registradas durante este periodo (Figura 1). Asimismo, emergencias económicas, como recesiones y fluctuaciones de los precios de los productos, afectan de manera profunda las economías de ALC, sobe todo gracias a la dependencia en ciertos productos clave en algunos países.